jueves, 28 de julio de 2016

Lolo

Lolo
Dir. Julie Delpy
Act. Julie Delpy, Vicent Lacoste, Eugenie Granval...



Francia, 2015, 99 minutos















Los jovencitos Frankestein
Era inevitable que yo fuera a verla. Una mujer progre y moderna, cosmopolita y parisina separada, liga con un cateto, anticuado y recién divorciado, que se muda a París por razones de trabajo. Allí se encontrará con el hijo de ella, su "Conejito de los Alpes" de 19 años, más que moderno cool, artista, liberado, y con un edipazo bien adobado de un egoísmo patológico. O sea lo mismo pero con las circunstancias inversas de lo que me sucedió a mí hace unos años.

El muchacho no está dispuesto a compartir espacio, novia (materna) y dejar de ser el auténtico reyezuelo de la casa y hará mil y una perrerías al novio para que su mamaíta lo abandone, lo que da pie a la parte de la comedia, bastante acertada, en la línea de Tanguy, qué hacemos con el niño, pero con dinamita dentro, lo que se traduce explícitamente en el visionado por parte de la pareja de un vídeo de El pueblo de los malditos, la mítica película de John Carpenter protagonizada por aquellos siniestros muñecos de carne.
Los jovencitos Frankestein

Magnífico el joven Vicent Lacoste, Hipócrates, que domina a la perfección esa mirada de adolescente eterno, cargada de infinito desdén y algo de conmiseración hacia los adultos, y muy ajustados los papeles de la madre y directora, Julie Delpy, Blanco de Kiewslowsky y Antes de que amanezca, y de un convincente y atribulado novio.

Sin ánimo de hacer un spoiler, es decir eso que antes se llamaba reventar el final, el Conejito de los Alpes espeta a su madre la cruda realidad. Sois vosotros los que habéis creado el monstruoso hijo único, sociópata, dueño y señor, heredero universal y déspota nada ilustrado. 
Tierra por medio, hacedme caso...
alfonso