viernes, 17 de abril de 2015

Lost River

París, Texas, Detroit
Guión y Dirección: Ryan Gosling
Act. Christina Hendricks, Matt Smith, Saoirse Ronan, Eva Mendes...



EE.UU, 2015, 95 minutos
París, Texas, Detroit
El tema de las madres solteras en EE.UU, o mejor dicho, de los hijos abandonados por el padre, es todo un género por esas tierras y da para tejer tontunas de todos los colores. Como esta, del niño de moda, Ryan Gosling, metido a director estilo David Lynch con perfume Wim Wenders. Parecía que había mejorado en los Idus de Marzo desde el monumento al hortera de Drive, pero aquí juega a enfant terrible, y lo único terrible es, como siempre, la maravillosa Eva Mendes.

Detroit, ese remiendo de urbe distópica, se luce como escenario de la pesadilla capitalista de América, y el fotógrafo realiza un buen trabajo con una selecta gama de rojos y verdes, diríase que sacados por los pelos de Hopper. El montaje la apuntala para que no se derrumbe el chiringuito, y desde luego, las críticas que tuvo en Cannes, inmisericordes, se las merece todas, algo atemperadas, porque desde aquí odiamos cordialmente a Godard y su secuela de críticos franchutes, fundamentalistas de la estructura y el croissant de mantequilla.

Pero, Ryan, muchacho, vuelve a lo tuyo, poner palmito, hacer de Santiago Segura gringo, -palillo en la comisura incluido-, y salvar a esas chicas tan guapas que salvas. Y así, advertidos y prevenidos, daremos un rodeo para no entrar en la sala desde donde nos mires con ese aire entre melancólico y bovino que gastas.
alfonso