sábado, 26 de diciembre de 2015

Macbeth

Corazón tan negro
Dir. Justin Kurzel
Act. Michael Fassbender, Marion Cotillard, Sean Harris...



UK, Francia, EE.UU, 2015, 113 minutos


El tráiler









Corazón tan negro
Una de las más potentes puestas en escena de la mayor tragedia de El Bardo, que ya siempre figurará al lado de la de Orson Wells y Akira Kurosawa, superior sin duda a la de Polanski. Fassbender compone un escocés aterrador y se come a la pobre Cotillard que no acierta con su venenoso personaje ni aunque se pinte la mirada de verde cicuta.

El director australiano ha apostado por la fuerza, que sin duda emerge del apabullante paisaje de los acantilados del norte de la isla de Skye y de las tierras altas de Inverness, con una banda sonora, -no sólo música-, inmisericorde, unas batallas perfectas con una cámara súper rápida muy contenida, y por el verso y el fortísimo, casi ininteligible, acento escocés.

Desde el avance del bosque de Birnam a las brujas todo destila fuerza e imaginación para innovar sin pisar el tenebroso paisaje de ruido y furia que enmarca la delineación de las pasiones modernas, en este caso la ambición y la codicia, a las que asistimos estos días representada por unos enanos patéticos vestidos de bufones.

Imborrable la cara de Fassbender cuando las brujas le anticipan su negro destino, que gira en esta versión más que en otras, sobre la maldición de no tener descendencia. Quinientos años más tarde se ha convertido en la mejor apuesta.
alfonso

viernes, 25 de diciembre de 2015

Un paseo por el bosque

El camino de Santiago laico
Dir. Ken Kwapis
Act. Robert Redford, Nick Nolte...


EE.UU, 2015, 104 minutos

















El Camino de Santiago laico
Adaptación chata, aburrida y sin gracia del divertido libro de Bill Bryson, último capricho de Robert Redford como productor y estrella botoxmizada en plena decadencia, con una pésima educación sobre cómo envejecer con dignidad. Todo en él parece a punto de desplomarse, la cirugía, el botox, el pelo teñido, la dentadura falsa, las lentillas de los ojos azules, la faja con que se sujeta la barriga. Al Nolte le da igual que le rebose por las costuras la vida de rosas, drogas y alcohol que ha llevado, gordo, rojo, hinchado y con la voz partida. 

La película desperdicia todo: el libro, los maravillosos paisajes, el naturalismo del autor y su amor por la naturaleza, la galería de personajes... y los autores del guión, un par de plumillas al servicio del dueño absoluto de la factoría Sundance, les tendrían que reciclar urgentemente... en guardabosques. Es plano, tonto y tedioso.
Camino de los Apalaches

El  Appalachian Trail, el Camino de los Apalaches, de Atlanta a Maine, de más de 3000 kilómetros, hace que el Camino de Santiago parezca un paseo dominguero por el Retiro y además se puede prescindir del increíble número de cretinos que pueblan el sendero más transitado del Norte de la península, el Camino Francés. La palma se la lleva un alto ejecutivo de marketing del Real Madrid, retirado en un albergue para peregrinos al que habría que colgar de su propio cíngulo. 

Lo hice hace varios años a cuenta de una página web del Ministerio de Cultura: en coche, claro, y como les decía a los peregrinos cuando les veía más exhaustos: vosotros pagáis por hacerlo. A mí me pagan.
alfonso 

viernes, 18 de diciembre de 2015

45 años

Dir. Andrew Haig
Act. Charlotte Rampling y Tom Courtenay


UK 2015, 93 minutos

















Un minuto para cometerlo y toda la vida para pagarlo
No se sabe qué es más increíble, si la historia de los 45 años de feliz matrimonio o la estupidez del marido de compartir con su esposa la historia de otra mujer previa a la boda. Además, la poderosa metáfora consiste en que aparece el cadáver exquisitamente congelado en un glaciar suizo de la que estaba destinada a ser su primera esposa, para más señas embarazada.

La historia se sostiene en dos de los mejores actores ingleses vivos, protagonistas de dos películas memorables, Tom Courtenay La soledad del corredor de fondo y Charlotte Rampling Portero de noche, aunque la segunda haya envejecido peor que la primera.

La película se indigesta con esos cielos ingleses tan blancuzcos como sus nativos, con una fotografía chapucera, con el ya clásico rictus invulnerable de la Rampling, con esos vestidos de terciopelo de las fiestas inglesas catetas comprados en Mark & Spencer... y mejora con el trabajo de él, sólido como una roca en su papel de obrero británico aburguesado.

La escena final, con el anodino discurso del marido en la fiesta de aniversario y la gélida y venenosa mirada de ella, recuerda la imperiosa necesidad de guardar siempre esa clase de secretos y nunca, nunca, nunca... hablar a la actual de tus ex. Ni mal siquiera. Believe me, sé de lo que hablo.
alfonso

viernes, 4 de diciembre de 2015

En el corazón del mar

Del Essex al Pequod
Dir. Ron Howard
Act. Chris Hemworth, Benjamin Walker, Brendan Gleeson, Jordi Mollá...

EE.UU-España, 2015


El tráiler


























Del Essex al Pequod
La historia verídica en que está basada la novela moderna por excelencia de América, Moby Dick. Cuenta el abordaje y hundimiento de un barco ballenero por un cachalote gigante blanco y la terrible historia de canibalismo que aconteció entre los náufragos y que Melville prefirió soslayar en su libro.

Recoge la fascinación del ser humano por el monstruo que llevamos dentro, en lo más profundo de nuestra delgada capa de civilización, valga la paradoja, y se enfrenta a dos libros magníficos, el ya mencionado y el de Nathaniel Philbrick del mismo título que la película. Y para los amantes del mar y de las ballenas recomendaría Leviatán de Phillip Hoare, donde recoge con todo lujo de detalles la redacción de la obra y vida de Melville, el ambiente de Nantucket, al sudeste de Boston, la vida e historia de la ballena.

La película constituye un auténtico placer en todos los sentidos: ambientación, banda sonora, actuación, -siempre que aparece Brendan Gleeson eso está garantizado-, y por supuesto el barco. Además respeta la atmósfera y el espíritu aventurero fin de siécle con unos efectos especiales moderados y en su justo lugar.

Quien se ha visto reflejado, como el protagonista y el que esto escribe, en el ojo de la ballena no lo olvida jamás. Y el que se ha bañado en alta mar y tiene una pizca de imaginación, mira un momento hacia el abismo sobre el que flota y se estremece. De placer y de miedo a la vez.
alfonso

sábado, 28 de noviembre de 2015

The assassin

Crujir de seda, historia vacía
Dir. Hou Hsiao-Hsien
Act. Shu Qi, Chang Chen, Zhou Yun...


Taiwan, 2015, 105 minutos

















Crujir de seda, historia vacía
Un auténtico espectáculo que merecería una mejor historia, o una medianamente inteligible, al menos para el público occidental.

China siglo IX, el emperador Tan ha tenido que destinar ejércitos y gobernadores a las provincias limítrofes para frenar las incursiones de los bárbaros, pero los señores feudales, conscientes de su poder, se rebelan contra el centralismo. Una princesa de la secta de los Asesinos, que dirige una monja princesa, se encarga de eliminarlos hasta que tropieza con su propia historia y su antiguo prometido.

Hasta aquí lo que se entiende y las similitudes con la historia reciente de este país. El resto,      -personajes que aparecen de pronto sin venir a colación, historias colaterales que pasan veladamente, epigramáticos nombres chinos...- te sumergen en el estupor o el vacío.

Magnífica fotografía, exteriores e interiores, sedas demasiados nuevas que arrojan frufrus algo grimosos, texturas que se adivinan entre el humo de los hogares, mucho rojo, poco wuxia pero realista, sin piruetas por los árboles y los tejados, y una preciosa protagonista. 

Entre algunos ronquidos y muchos espectadores abandonando la sala se disfruta de los travelling laterales, del preciosismo y del lejano exotismo  de Oriente. Pero como dice mi acompañante, está encriptada.
alfonso

jueves, 19 de noviembre de 2015

Sicario

Benicio y poco más
Dir. Denis Villeneuve
Act. Emily Blunt, Josh Brolin, Benicio Del Toro...


EE.UU., 2015, 121 minutos

















Benicio y poco más
Efectivamente uno es seguidor de Benicio del Toro, el mejor Che del cine, la mirada más lánguida y peligrosa del cine americano, en su doble vertiente gringa y latina, pues no reniega de su castellano con acento viperino y su origen puertoriqueño.

Aquí lo mejor son las escenas de Ciudad Juárez, la Bestia, el pozo de horror de miles de mujeres asesinadas por el hecho de serlo y miles de hombres por el hecho de no serlo, apenas mulas para el narco. Nada les ha hecho el Imperio, ni el español verdaderamente aterrorizado por su capacidad de crueldad precolombina, ni el de los Estados Unidos, que no más pone el ansia por meterse por cualquier orificio de su cuerpo la sustancia, qué sustancia no importa.

Al final, oda a los servicios especiales de la CIA recién llegados de Afganistán, unas pinceladas de romanticismo pestilente por la pérdida de la familia del protagonista y unas magníficas imágenes de Juárez, el espejo invertido de que no se puede tratar a la gente como basura sin que se convierta en eso mismo, verdadera arma letal, ya sea en París o México, aunque al final sirva para que suban las acciones de las multinacionales de las armas.
alfonso


sábado, 7 de noviembre de 2015

Dheepan

De un conflicto al otro
Dir. Jacques Audiard
Act. Antonythasan Jesuthasan, Kalieaswari Srinivasan, Claudine Vinasithamby


Francia, 2015, 109 minutos

Palma de Oro en Cannes














De su conflicto al nuestro
Ya nadie sabe de guerras ni entiende los conflictos, y en algunos casos ni se sabe por dónde cae el país, puritita carne de globalización. El conflicto de Sri Lanka fue brutal, ajeno a la mirada de Occidente, no de India, y puso de manifiesto que los budistas no son peluches, sino tan asesinos y genocidas como cualquiera. Por cierto los Tigres Tamiles, representantes del dravidiano pueblo Tamil, -los que sueñan con elefantes-, subyugado por la mayoría cingalesa de la isla, tampoco eran precisamente Blancanieves.

En un interregno del conflicto un combatiente tamil se busca una familia falsa para pedir refugio en Europa, Francia, donde ni el idioma ni la cultura le suenan de algo, dada la herencia colonial inglesa en el antiguo Ceylán. Y de su guerra aterriza en otra, la de los banlieue parisinos, tomados por las mafias de todo tipo de inmigrantes. El protagonista, por cierto escritor y político refugiado tamil en la vida real, va encontrando su lugar en ese mundo, en esa familia falsa, hasta que la violencia propicia un desenlace que acaba en Inglaterra.

Muy bien filmada con fotografía tenebrista y cámara omnipresente en primer plano, tiene ese toque Audiard de sordidez y sinceridad, de realidad y comprensión del otro, de violencia social y conflicto étnico, alejado del buenismo Podemista apto sólo para el periodismo trucho televisivo del Évole y su alegre y falsaria muchachada.

Maravilloso trabajo de Kalieaswari Srinivasan, la joven esposa. Imprescindible
alfonso


miércoles, 4 de noviembre de 2015

Truman

Un campo minado... de bombas trampa
 Dir. Cesc Gay
Act. Javier Cámara, Ricardo Darín,  y el cameo de José Luis Gómez


España-Argentina, 2015, 108 minutos
Un campo minado... de bombas trampa
Con tanta escena lacrimógena se olvidaron de la historia. Con tanto morbo pegajoso, más babeante que el perro protagonista, harán llorar a los octogenarios que poblaban la sala en esta ridícula fiesta del cine, en la que entregas tus datos por tres euros de descuento y te gastas seis en las palomitas y la Coca Cola king size, pero aburren a los sesentones en ciernes, acostumbrados a historias de despedidas eutanásicas y definitivas  menos charcuteras.

Se trata de una acumulación -contada con mucho oficio-, de escenas delirantes donde se lleva la palma la de la elección por el muerto in pectore de la urna crematoria, aunque tampoco desmerece la del médico; la del hijo que sabe que su padre va a poner fin a sus días pero calla; la de la petición de perdón al que le pusiste los cuernos y los lleva con resignación cristiana, la del consejo del veterinario para que el perro pase el duelo de la pérdida... 

Me quedo con la de José Luis Gómez y la de las lesbianas adoptantes de ruso neurasténico porque tienen un poco de gracia y algo de mala baba.

No me puedo imaginar el producto final sin el concurso de estos dos actores.

Y al cada día más mercenario Cesc Gay le recordaría que no hay mayor emoción que no experimentar ninguna.

Y si te sorprende, a traición, a mansalva, un sentimiento que no puedas capear, como por ejemplo el primer verso de Hello de Adele y te golpea en el agujero que tienes por alma hay que tener a mano un antídoto directo, un alcohol sincero y expeditivo como el tequila con el que cauterizar los síntomas y librarse de ellos como de la vida: en minutos y a gollete.
alfonso

domingo, 25 de octubre de 2015

Amama

La tradición es una maldición
Dir. Asier Altuna
Act. Iraia Elias, Kandido Uranga, Klara Badiola...


Euskal Herria, 2015, 103 minutos

















La tradición es una maldición
Así lo cantaba hace 30 años el solista pamplonica de La polla récords levantando ampollas en su propio auditorio, algunos recién  bajados en alpargatas del caserío.

Se trata de una fábula peneuvista sobre una familia dueña por generaciones de un -maravilloso- caserío y sus hijos que quieren vivir su vida, trufada de tópicos y milenarismo vasco a degüello.

Algunas escenas te ponen rojo hasta la orejas: los llamados al neolítico, la muerte de la matriarca en una cueva tras convocar a todos los vástagos, la performance -irritzi incluido- con la amama de cuerpo presente; las cuerdas que sostienen simbólicamente a los hijos, el fusilamiento del perro del caserío por viejo, el flequillo que le llega casi hasta el rímel petrolero de la rebelde sin causa, el papel callado de la ama, el malhumor cazurro del aita, la ausencia total de sentido del humor...

Ganaría muchos enteros si fuera muda, a pesar de la belleza del euskera original, con una música muy bien introducida en el paisaje y una fotografía efectiva, pero solo falta Sabino Arana bailando un aurrezku a dos con Xabier Arzalluz.

Defenderé
la casa de mi padre.
Contra los lobos,
contra la sequía,
contra la usura,
contra la justicia,
defenderé
la casa
de mi padre.
Perderé
los ganados,
los huertos,
los pinares;
perderé
los intereses,
las rentas,
los dividendos,
pero defenderé la casa de mi padre.
Me quitarán las armas
y con las manos defenderé
la casa de mi padre;
me cortarán las manos
y con los brazos defenderé
la casa de mi padre;
me dejarán
sin brazos,
sin hombros
y sin pechos,
y con el alma defenderé
la casa de mi padre.
Me moriré,
se perderá mi alma,
se perderá mi prole,
pero la casa de mi padre
seguirá
en pie.

Así lo cantaba Gabriel Aresti en tiempos de la dictadura, el mayor poeta de la tierra con permiso de Kirmen Uribe, y así lo haremos... aunque alquilado y solo sea para que se no se lleven el patxaran.
alfonso

domingo, 18 de octubre de 2015

La señorita Elsa

Herméticamente abierto
Dir. José Luis Saiz
Act. Ángela Boix
Versión: Lola Blasco

Sala Sexto Derecha

Sobre un libro de Arthur Schnitzler











Herméticamente abierto
Arthur Schnitzler fue un escritor y dramaturgo vienés, judío por supuesto, que causó grandes dosis de escándalo hasta que los nazis honraron su obra quemándola junto con la de su amigo Freud y muchos otros. Autor de la maravillosa Eyes wide shut, (Con los ojos herméticamente abiertos, la traducción es mía) llevada al cine por el genial Stanley Kubrick, es precursor y maestro del monólogo interior y puso en cuestión las convenciones burguesas sobre amor y matrimonio, además de otras instituciones no menos letales como el ejército y la monarquía.

En una época en que el sexo, recién descubierto como materia de estudio, lo impregnaba todo, desde la histeria a la pintura de Gustav Klimt, era perfectamente pertinente aprovechar la oportunidad para echar algo de vitriolo sobre las costumbres burguesas de entreguerras (en realidad un periodo del que no hemos salido) y los finos y decadentes vicios de los caballeros austro húngaros.

Por ahí boga el texto, yo creo que mal adaptado al teatro y regularmente dirigido pese al esfuerzo de la actriz única, que se machaca en el teatro del vermú, a las 12.30 del domingo, en un piso de la Ronda de Toledo, donde se filtran las conversaciones del castizo vecindario y llega el fragor del tráfico capitalino, con una puesta en escena e iluminación errática, por decirlo de manera suave.

Uno que es ya antiguo, reitera que el teatro tiene dos escenarios, las salas ad hoc y la calle. El resto es miseria de estos tiempos aciagos en que hay que luchar por lo evidente. (Bertold Brech)
alfonso

viernes, 16 de octubre de 2015

The martian

AgitProp a la americana
Dir. Ridley Scott
Act. Matt Damon, Jessica Chastain, Michael Peña...



EE.UU, 2015 141 minutos
















AgitProp a la americana
La muerte de su hermano Tony, tirándose desde un puente sin motivo aparente, debió chalar a Ridley, el autor de Blade Runner, Alien, Los duelistas... También es verdad que ha firmado bodrios como La teniente O'Neill, o El consejero, pero el desbarre religioso comenzó con Prometheus, llena de simbología cristiana fundamentalista y culminó con Exodus, que debe ser como un exorcismo pero en versión garrulo-almeriense. Definitivamente se le ha acabado el crédito.

Esta no es más que un largo publireportaje de las bondades del Imperio, ahora que el director milita definitivamente en el lado oscuro. Pero ni siquiera está bien hecho, o quizá yo esté perdiendo el sentido de la realidad, lo que admito, y no esté al corriente de las tendencias más rabiosamente modernas de la televisión y ni siquiera hojee las revistas para hipsters desnatados que incluye el sábado El País.

Todo es tan obvio que produce dentera: la comandante femenina, el indio (de India) inteligentísimo, el negro rapero científico experto en Astrodinámica (sic); el chirriante sentido del humor, entre Bob Hope y Seinfield; la música discotequera de ascensor, el latino enrollado, los chinorris paleocapitalistas, los valores militares... Todo para cantar las virtudes patrias, la aplastante sabiduría científica de la NASA y el complejo tecnológico militar estadounidense.

Y todo en un país que tuvo a Reagan de presidente, a Schwarzenegger de gobernador de California, y a Aznar de conferenciante ¡en inglés! aunque en universidades de tercera fila con audiencia lobotomizada como los votantes de Junts per el sí.

Seria candidata al bodrio del año.
alfonso

viernes, 9 de octubre de 2015

La playa de los ahogados

Lánguido oficio galego
Dir. Gerardo Herrera
Act. Carmelo Gómez, Antonio Garrido, Luis Zahera y (horror) Celso Bugallo...

España, 2015, 96 minutos







Lánguido oficio galego
Leí la novela hace años y la tenía borrada. Por la levedad de la trama, de los personajes y del paisaje gallego que allí se narraba. Y eso que era un policíaco bien contado, pero como la película, acartonado, lleno de tópicos: el policía bruto y el gallego, los personajes cerrados como ostras, las supersticiones, la mar y los pescadores...

La película está rodada con oficio, con buenos actores, Carmelo Gómez y el excelente Luis Zahera, unos secundarios pasables y el siempre aborrecible gallego oficial del cine y teatro español Celso Bugallo, que se podrían guardar para cuando filmen Ocho apellidos galegos... Pero no tiene profundidad, ni puesta en escena creíble, ni ahonda en los personajes. Buena para una tarde de domingo frente al televisor, pero digna. 

Galicia tiene algo magnético que tira, probablemente su propia oscuridad, ese esquinamiento geográfico que responde al carácter y los tópicos sobre ellos (y ellas), todos ciertos, la lluvia, su aislamiento. Bueno, y los percebes y el orujo blanco que también tiran lo suyo.

Voy a ver como un sonámbulo todas las películas de montaña, de Malick, Wang Kar Wei, de mar y de Galicia. Esta reunía dos elementos. Faltaba también el quinto elemento mágico, los submarinos. El día que los reúnan todos no salgo del cine. Pero no me imagino a Malick y al hongkonés rodando una película en Galicia, de marineros embarcados en un submarino tras coronar una cima. 

Sería el carallo, home...
alfonso

jueves, 8 de octubre de 2015

El minuto del payaso

Ese minuto puede salvarte la vida
Dir. Fernando Soto.
Act. Luis Bermejo


Sala Margarita Xirgú, Teatro Español

















Ese minuto puede salvarte la vida
Un payaso espera en el foso a que le den la entrada para su minuto entre actuación y actuación de un homenaje al circo. Durante esos 75 minutos traba un monólogo con mucho oficio en el que aparece su familia, una saga circense de payasos y la mujer forzuda; se come un plátano, no un kiwi, un plátano; se viste de Augusto, juega y mastica las palabras como hacen los niños, hipotálamo, buchito, saquete...; se pega con los sacos de la tramoya, nos cuenta que quería ser domador de elefantes, su romance con una rusa domadora de caballos que acaba con un domador de tigres, un tío de puta madre; que su padre le tiraba tartas y le pegaba con la mano abierta, lo que más hace reír a la gente.

Mientras, espera que venga un productor a proponerle su minuto en la televisión, siempre el mismo minuto. El hombre bala se pasa de frenada.

Domina las rutinas del payaso más clasico, Charlie Rivel, Los Tonetti, Zampabollos, y se trasmuta en Vladimir, quizá en Estragón, recita a los hermanos Marx,  incluido Carlos, juega con la audiencia y acaba haciendo con ella lo que quiere y contando el nudo de El nombre de la rosa, o de la risa, el por qué no debíamos reír porque eso disgustaba a dios.

Lástima que tras el climax se siente y nos cuente todo lo que nos había contado en payaso, ahora en serio, como con moraleja. Como si no nos hubiéramos enterado la primera vez. Eso le cuesta la tercera estrella.

Pero como no deja de repetir, "Me dijo el chino de Burgos que en peores garitas hemos hecho guardia. En peores garitas... Me lo dijo el chino de Burgos". Si lo sabré yo... Muy buena.
alfonso

sábado, 3 de octubre de 2015

Jack

La realidad a 140 centímetros
Dir. Edward Berger
Act. Ivo Pietzcker, George Arms, Luise Heyer...



Alemania, 2014, 103 minutos












La realidad a 140 centímetros
Fue Ozu el que inventó el plano y Kore Eda, Kiseki, Still Walking, De tal padre tal hijo, el que lo patentó en sus películas de niños situando la cámara a la altura de sus ojos, aunque ahora el plano medio fijo pase a ser una nerviosa steady cam que sigue la frenética actividad de dos niños abandonados por su madre.

Y esa mirada sirve para retratar una sociedad enferma, preapocalíptica, en un Berlín inhóspito para los seres humanos que parecen serlo sólo hasta que olvidan que fueron niños. Pero podría ser cualquier ciudad de esta andrajosa Europa de clones y franquicias, de cadavéricos centros comerciales y subterráneos asfixiados por el neón, de autistas drogados y amortajados y tecnología trampa.

Los dos niños, hijos de diferente e ignoto padre, quedan abandonados tres días en la ciudad mientras la madre, un veinteañera soltera, busca pareja entre los escombros de los personajes que la rodean. Por supuesto sin que nadie le haya pedido jamás el carné que habilita para traer hijos a este mundo.

Los niños cumplen tan bien como siempre, especialmente el de la triste mirada y el montaje -muy profesional para ser primerizo- consigue sortear los baches del relato a veces algo errante.

Incluso a esa altura típica de los 12 años, el rigor mortis de esta sociedad apesta. 
alfonso

viernes, 25 de septiembre de 2015

La camarera Lynn

La estrecha línea de la normalidad
Dir. Ingo Haeb
Act. Vicky Krieps, Lena Lauzemis...

Alemania, 2015, 90 minutos


















La estrecha línea de la normalidad
Una camarera de habitaciones de hotel tiene obsesión por la limpieza, las pertenencias de los huéspedes, que a veces se prueba, y por sus conversaciones y rutinas. Para ello se esconde debajo de las camas para espiar sus vidas. Un día un hombre lleva a una dominatrix de sadomasoquismo light y la voyeur se queda literalmente prendada y comienza con ella una relación.

Hasta aquí todo normal, dos adultos que consienten, curiosidad y deseo, y cada uno es quien es, no quien pretende ser. Pero el novelista - el guión parte de un libro-, tiene que teñir las circunstancias de anormalidad, de rareza y por ello la inventa un pasado brumoso, un internamiento en un centro de terapia, y algunas escenas que no vienen a cuento. Y una madre fría como un carámbano y distante, la típica madre de destrucción masiva, pero que aquí casi pasa desapercibida. Y ¡ale hop! la muchacha que tiene sus manías como todos y sus gustos sexuales como casi todos, ya ha traspasado la raya que a la mayoría le hace sentarse confortablemente encima de sus almas y sus familias.

El director cuenta la película minuciosamente, sin concesiones, con colores azules y rojos alternativamente según la pasión de la protagonista y las mortecinas luces septentrionales.

A la alemana. Aunque después del timo Volswagen eso ya no quiera decir nada.
alfonso

martes, 22 de septiembre de 2015

Everest

Mar y montaña
Dir. Baltasar Kormákur
Act. Jake Gyllenhaal, Josh Brolin, Emeily Watson, Keira Knightley...


UK, Islandia, EE.UU. 2015, 121 minutos
















Mar y montaña
Al Everest, el monte más alto, pero no el más difícil, han subido 6.208 personas, 3.337 alpinistas extranjeros y el resto, 2.871, sherpas. Han muerto 240. A partir de 1995 se empezaron a comercializar ascensiones para gente sin conocimientos ni preparación pero con dinero, alrededor de 60.000 dólares con los permisos.

En 1996, una gigantesca tormenta que llegó a rebajar el oxígeno de la cumbre, ya escaso,  un 14%, se cobró doce vidas de dos expediciones que llevaban escaladores mercenarios. La película cuenta bien esa historia, con el ternurismo justo y la moralina precisa, ciñéndose a los hechos y con un final fatídico, es decir, verdadero. Los créditos del equipo técnico duran casi más que la propia película y cuando acaba dan ganas de quedarse a verla otra vez, por los paisajes y la sensación de aventura y drama. 

Todos los que la han criticado pecan de listillos y de montañeros "enrollados", un oxímoron, porque la gente de la montaña es casi tan genuina como la de la mar. Y he dicho casi...

En efecto, se sube porque está ahí o se navega porque es lo único importante, más que vivir. Y porque ambas son varas de medirse uno mismo.
alfonso

viernes, 11 de septiembre de 2015

Una segunda oportunidad

Luteranismo + culpa
Dir. Susanne Bier
Act. Nikolaj Coster-Waldau, Ulrich Thomsen, María Bonnevie...


Título original: En chance til

Dinamarca, 2014, 105 minutos
Luteranismo + culpa
Un bebedizo infalible debido a la condición autoreconocida de la directora de sus ancestros judíos, que tan buenas películas ha procurado a la cinematografía escandinava, empezando por Dreyer y siguiendo por Bergman. 

No es el caso, por el ritmo, las interpretaciones, los desajustes del guión con alguna trampilla demasiado evidente, y porque la historia naufraga debido precisamente a su excesiva densidad y su pegajosa moralina.

Un policía, padre reciente, acude a la llamada de una mujer maltratada y se encuentra una pareja de yonquis con un niño en estado lamentable. Su propio hijo muere, al parecer de muerte súbita al cabo de unos días y se le ocurre el reemplazo, la segunda oportunidad. Y luego vienen los giros de guión y la moraleja final, acorde con la resolución meliflua de un dilema que no es tal.

Ciertamente las segundas oportunidades no abundan, aunque deberían constar en la Carta de los Derechos Humanos. Pero sin trampas.
alfonso

viernes, 4 de septiembre de 2015

Corazón silencioso

Las ceremonias de los adioses
 Dir. Billie August
 Act. Ghita Norby, Paprika Steen, Danika Curcic...




Dinamarca, 2014, 97 minutos
Las ceremonias de los adioses
El exhibidor español ha cambiado el título, falseando el original. De Corazón en calma a Corazón silencioso hay un mundo, más en un tema de eutanasia. Pero ellos son así, pura basura, como los guionistas de Tele5. 

Sin embargo, se trata de un buen guión original que pasará rápidamente al teatro. Una familia se reúne para pasar las últimas 48 horas de una madre con ELA que ha decidido morir por su propia mano antes de que se le paralice y así no pueda culparse de homicidio al marido médico.

Una buena galería de personajes, casi todos con su escena, con desarrollo algo lento y un poco manierista, al mejor estilo escandinavo, con toques Dogma, pero tanto el planteamiento original como las diversas etapas de la trama están muy bien graduadas y cuentan con interpretaciones sobresalientes. Se agradece la falta de sentimentalismo, a pesar de la temática. Extraordinaria fotografía de interiores, los personajes están encerrados con sus decisiones, en que destacan las texturas y la iluminación nórdica. Y lo mismo puede decirse de la puesta en escena que mima los detalles, especialmente los relojes, que juegan un papel destacado.

Como dice el personaje al que se le toma por algo tonto, los días pasan lentos, los años rápidos. Y se apresura a añadir. "No es que me haya vuelto inteligente de pronto. Es una canción". Para bailarla.
alfonso

viernes, 28 de agosto de 2015

Operación UNCLE

Taquillazos para hipsters
Dir. Guy Ritchie
Act. Henry Cavill, Armie Hammer, Hugh Grant, Alicia Vikander...




EE.UU. 2015, 116 minutos














Taquillazos para hipsters
Recreación de una serie de los 60' que hacía furor en nuestra casposa televisión de la época, -aunque menos cutre y hortera que la actual-, El hombre de CIPOL, a manos de un especialista, Guy Ritchie, que ya hizo lo propio con Sherlock Holmes, añadiéndole su estilo particular: una puesta en escena cuidadísima, una gran potencia visual, unos efectos especiales de lujo y un apasionado gusto por el detalle. El uso continuo de las pantallas Croma y los efectos digitales no le restan mérito, pero a veces canta el forillo, como se decía hace muchos, muchos años.

Discurre en la Roma y Nápoles también de los 60, por lo que los Ferraris antiguos, las lanchas Riva, los modelitos Opair, los lujosos hoteles romanos, la infaltable escena de Piazza Espagna con la Fontana di Trevi, los zapatos, el diseño industrial italiano... todo está cuidado hasta la arcada.

La historia es una solemne tontería, pero nadie va a ver películas de Ritchie por sus guiones. Al menos no insulta la inteligencia con sus tramas, brilla el sentido británico del sarcasmo, y la fotografía y la música son espléndidas como diría Hugh Grant, siempre encasillado en su eterno papel de british que tanto gusta a los isleños.

A veces de tanto diseño y con la pareja de muchachos mirándose tiernamente a los ojos tiene un acusado barniz gay, pero después de haber estado casado con Madonna unos años, no me extraña que Guy pierda aceite y se haya cambiado de acera.
alfonso

sábado, 22 de agosto de 2015

Cut Bank

La suerte del principiante
 Dir. Matt Shakman
Act. Jonh Malkovich, Billy Bob Thorton, Bruce Dern...



EE.UU, Canadá, 2015, 92 minutos
La suerte del principiante
El director viene de hacer series de televisión, cine para tontos, y se nota, pero disfruta de buenas amistades, sobre todo John Malkovich, inolvidable protagonista de El cielo protector, Billy Bob Thorton, un actor muy efectivo, y es amigo de los Coen, que le han dejado homenajear la grandísima Fargo, una película que uno no se cansa de ver, y le han echado una manita en otros aspectos incluido el dinero.

Pero la puesta en escena es plana como las series de televisión, los guapos de turno son malos como en las series y rodar con celuloide es caro y costoso y se desperdicia si la fotografía tampoco es gran cosa a pesar de los paisajes de Alberta en Canadá, donde el frío llega a los  cuarenta bajo cero... ¡quién los pillara!

Es fácil para un progre como el director radiografiar la América profunda y plantear una rocambolesca historia para huir como alma que lleva el diablo del cartero simpático, las tartas de cereza, la cheerleader, el jugador de fútbol americano frustrado, el sheriff taciturno, y el frikie descerebrado que al final se convierte en el único cuerdo de toda la escena, digna de un cuadro de Norman Rockwell.

La suerte del principiante, es su primer largometraje, la irá perdiendo conforme vaya aprendiendo a hacer cine de calidad. Como todos, estará deseando dejar de ser indie, para hacerse mainstream y filmar a los Cuatro Fantásticos o el súper héroe de turno. O seguir haciendo series... 
alfonso

jueves, 20 de agosto de 2015

Señor Manglehorn

Señor Manglehorn
Dir. David Gordon Green
Act. Al Pacino, Holly Hunter...


EE.UU. 2014, 97 minutos
Empacho Pacino
Una de esas películas hechas a la medida del ego del siempre sobreactuado actor, construida con tres ideas y 300 palabras, más o menos las que forman el lenguaje del americano medio: genial, entrenador, buen tipo, malos, bacon, donuts... 

Una idea es la que versa siempre alrededor del padre estadounidense medio, que o bien ha salido por piernas de sus responsabilidades, o bien lleva indefectiblemente al hijo a jugar al béisbol. La otra habla sobre el individualismo y la amargura de ese mismo americano demediado, algo exagerada al vivir en Texas, y las segundas oportunidades de la vida, siempre felizmente resueltas con final empalagosamente feliz.

Se sale de la película literalmente empachado del italo americano, con ese papel creado, -probablemente por él mismo-, a la medida de él mismo, es decir, pasado de revoluciones hasta quedar gripado, que no deja de salir en ningún plano de la cinta, por lo demás mediocre en todos los sentidos, y eso siendo magnánimos.

De la historia solo se libra el amor por los gatos, la mascota perfecta, distante, descreída,  de vuelta de todo, individualista y autosuficiente, que nunca podría como el perro, ser policía o chivato detector de drogas.
alfonso

lunes, 17 de agosto de 2015

El cartero de las noches blancas

El mundo es ancho y ajeno
Dir. Andrey Konchalovsky
Act. Aleksey Triapytsyn, Irina Ermolova...


Federación Rusa, 2014, 90 minutos

















El mundo es ancho y ajeno
El cine debería ser herramienta para conocer lo distante y ajeno, por ejemplo Rusia, tan vilipendiada por la propaganda occidental que vuelve a recrear la Guerra Fría, tan reducida a caricatura de mafiosos y borrachos, autoritarios y niños de todo a cien adoptados de Chernobyl. Nada mejor que ver teatro ruso, por ejemplo Cheek by Jowl con la compañía Pushkin de Moscú, en Medida por medida para percibir la sensibilidad y el maravilloso trabajo de los actores rusos.

O esta película, que discurre en el lago Kenozero, en el norte de Rusia lindando con Finlandia, próxima al cosmódromo de Mirni, República de Carelia. Allí un cartero se sirve de una barca para llevar el correo, las pensiones y algunos otros encargos básicos a los habitantes de un lago bajo la luz lechosa de las noches blancas.

El director, hermano de Nikita Mijalkov, reivindica su país y su apabullante naturaleza, sus logros técnicos en el espacio y sus gentes, la contemplación quieta de esas noches como las que describía Dostoievsky a orillas del Neva, arrebatadamente románticas, el alma eslava y los gatos como trasunto precisamente de ese alma y sus circunloquios, ya sean imaginarios o de peluche.

Ganas dan de ponerse en pie cuando suena muy bajito el antiguo himno de la Unión Soviética. Son los reflejos de un pasado con educación sentimental a la sombra de Chejov, Tolstoy, Dostoiesvky, Lenin... ¡Nasdrovia!
alfonso

sábado, 15 de agosto de 2015

Y de repente tú

El subgénero del subgénero
Dir. Judd Apatow
Act. Amy Schummer, Bill Hader...


EE.UU. 2015, 125 minutos







El súbgenero del subgénero
El subgénero es la comedia de jóvenes gordas y poco atractivas en busca de sexo y luego marido, aunque empiecen, como es el caso, renegando de la monogamia y entregándose a la vida voluptuosa. Se inauguró con Briget Jones, una comedia muy británica, en la estela de Cuatro bodas y un funeral y con el encasillado pero terriblemente efectivo Hugh Grant como inglés pervertido y por supuesto alérgico al matrimonio.

Aquí la réplica corre a cargo de la factoría Apatow, Virgen a los 40, Si fuera fácil... que retuerce el género hasta subvertirlo, de macho ligón a hembra desprejuiciada, para finalmente reconducirlo por los caminos más trillados y reaccionarios en eso de la pareja y el amor. Y lo hace a la americana en su versión más gamberra la primera y desternillante media hora para luego realizar el discurso rancio y carca de siempre en pos de la familia nuclear en su doble vertiente patriarcal y atómica, en la onomástica del bombardeo de Hiroshima y Nagasaki.

El guión corre a cargo de la actriz principal, Amy Schummer, una especie de Eva Hache gordita y resultona hasta que cumpla los 25, deslenguada y con un desparpajo para los hombres y la revista telecinquera para la que trabaja que produce los mejores dividendo en cuanto a risa se refiere.

Luego las citas deportivas al baloncesto y otros deportes innobles gringos, a Juego de Tronos, léase Juego de Truños, y a otros hitos de la cultura populista levantan bostezos hasta el insulto final en forma de declaración amorosa travestida de cheerleader

Hay que leerla en clave de lo que va a  convertirse la protagonista en unos años: una foca que le ha caído en desgracia a nuestro mejor amigo, y que ha cambiado el gracejo por la bata y las zapatillas de borla.
alfonso

lunes, 10 de agosto de 2015

Mi casa en París (The old lady)

Un judío, tres actores, y una historia inmortal
Dir. Israël Horovitz
Act. Kevin Kline, Kristin Scott Thomas, Maggie Smith, Dominique Pinon...



Reino Unido 2004, 107 minutos















Un judío, tres actores y una historia inmortal
Por si alguien no repara en los títulos de crédito iniciales o en el apellido del director, famoso dramaturgo estadounidense por cierto, aparece en la primera escena un rabino en bici, en la segunda se nombra a Sigmund Freud y luego se cita sin rubor aunque muy traído a colación a Phillip Roth y su escandaloso Lamento de Portnoy.

Un gringo acude a París, -qué obsesión la de los americanos por París-, a recibir un gran piso, única herencia que le ha dejado su acaudalado padre, y se encuentra una octogenaria viviendo con los derechos de usufructo y una especie de hipoteca inversa. A la postre resulta ser la amante secreta del padre, que tiene una hija viviendo con ella que no se sabe si es hija de su marido legal o de su amante.

Y así se va desvelando la historia de un hijo no querido, borracho, perdedor, con tendencias suicidas y poca autoestima, una madre suicidada, un padre odioso, una vieja dama casada y con amante extranjero y una hija a la deriva que también practica esa costumbre tan gabacha de ser amante de un casado. Y así los tres excelentes actores bailan de la comedia a la tragedia, del sutilísimo humor al drama, en un recital que antes fue obra de teatro, maravillosamente ensamblados.

Es el otro lado, el más semítico, de la eterna historia de los hijos no queridos, con mucho sexo, algo de incesto, drama y humor y un brillante colofón dicho al desgaire. "Ya que no tenemos hijos, extíngamosnos; que todo acabe con nosotros".
Así sea.
alfonso 

sábado, 8 de agosto de 2015

Al otro lado del muro

La cara oculta de la luna
 Dir. Christian Schowochow
Act. Jördis Triebel, Tristan Göbel, Alexander Scheer...


Alemania, 2013, 102 minutos
La cara oculta de la luna
Pasar al otro lado del muro en Alemania, desde la República Democrática a la Federal, no era Hollywood, nunca mejor dicho, pero nadie se atrevía ni a susurrarlo. Occidente te esperaba con una Coca Cola, unos rutilantes escaparates y una promesa de prosperidad. Y con el Centro de Refugiados de Emergencia, un lugar tan siniestro como su nombre.

Si además tu marido fue ruso, figura como muerto y probablemente haya sido espía, el futuro no es muy halagüeño y los sueños se funden a negro antes de zozobrar en la punzante realidad de los años 70.

Está hecha a la alemana, sin una concesión, sin música, sin planos fijos, con una cámara al hombro digital y bailona que consigue un grano duro que le sienta bien a la historia pero que acaba agobiando al espectador y hace que se mueva incómodo en la butaca por la aspereza del tono.

También el discurso es básico apoyado en buenas interpretaciones, sobre todo de ella, una rubia de ojos muy azules que deslumbran aun enfundada en esas ropas que parecen diseñadas por un sargento prusiano de artillería de montaña, pero se agradece el concepto, esa otra mirada que hurga en el paraíso capitalista que solo la gente de la Fracción del Ejército Rojo cruzaba en sentido inverso, dispuesta a que nunca jamás hubiera otro Hitler en su tierra.
alfonso