Dir. Lynne Ramsay
Act. Tilda Swinton, John C. Reilly, Jasper Newell
Tenemos que hablar de Lynne. Pero poco
Desagradabilísima película seria candidata al bodrio del año, en que partiendo de la Tomatina de Buñol trata de epatar al personal a base de escatología y considera flipante (sic!) cuestionar la maternidad desde un punto de vista femenino.
Para ello y sin ningún pudor crea personajes de cartón, los manipula sin escrúpulos y maneja las secuencias de manera que resulten lo más agresivas posible jugando con las texturas excrementales, los colores vómito y la música rascona. La Swinton hace de ella misma, para algo es la productora, y John C. Reilly no sabe, no contesta. Bien podría recordar ese otro cuestionamiento de la maternidad en su papel de marido pánfilo en Las Horas.
Las feministas radicales de mi generación eran básicamente pesadas pero socialmente positivas como fuerza de choque contra aquella España de radio y sacristía.
Las actuales -ver foto adjunta de la directora-, son básicamente desagradables, sobre todo si optan por una alternativa de diseño o artes plásticas. Y perfectamente integrables en las cuotas femeninas, piénsese en Rita Barberá, por ejemplo, en esta España que sigue siendo de sacristía y que sólo ha cambiado el Loden por el Barbour, el transistor por el móvil.
alfonso