viernes, 25 de septiembre de 2015

La camarera Lynn

La estrecha línea de la normalidad
Dir. Ingo Haeb
Act. Vicky Krieps, Lena Lauzemis...

Alemania, 2015, 90 minutos


















La estrecha línea de la normalidad
Una camarera de habitaciones de hotel tiene obsesión por la limpieza, las pertenencias de los huéspedes, que a veces se prueba, y por sus conversaciones y rutinas. Para ello se esconde debajo de las camas para espiar sus vidas. Un día un hombre lleva a una dominatrix de sadomasoquismo light y la voyeur se queda literalmente prendada y comienza con ella una relación.

Hasta aquí todo normal, dos adultos que consienten, curiosidad y deseo, y cada uno es quien es, no quien pretende ser. Pero el novelista - el guión parte de un libro-, tiene que teñir las circunstancias de anormalidad, de rareza y por ello la inventa un pasado brumoso, un internamiento en un centro de terapia, y algunas escenas que no vienen a cuento. Y una madre fría como un carámbano y distante, la típica madre de destrucción masiva, pero que aquí casi pasa desapercibida. Y ¡ale hop! la muchacha que tiene sus manías como todos y sus gustos sexuales como casi todos, ya ha traspasado la raya que a la mayoría le hace sentarse confortablemente encima de sus almas y sus familias.

El director cuenta la película minuciosamente, sin concesiones, con colores azules y rojos alternativamente según la pasión de la protagonista y las mortecinas luces septentrionales.

A la alemana. Aunque después del timo Volswagen eso ya no quiera decir nada.
alfonso

martes, 22 de septiembre de 2015

Everest

Mar y montaña
Dir. Baltasar Kormákur
Act. Jake Gyllenhaal, Josh Brolin, Emeily Watson, Keira Knightley...


UK, Islandia, EE.UU. 2015, 121 minutos
















Mar y montaña
Al Everest, el monte más alto, pero no el más difícil, han subido 6.208 personas, 3.337 alpinistas extranjeros y el resto, 2.871, sherpas. Han muerto 240. A partir de 1995 se empezaron a comercializar ascensiones para gente sin conocimientos ni preparación pero con dinero, alrededor de 60.000 dólares con los permisos.

En 1996, una gigantesca tormenta que llegó a rebajar el oxígeno de la cumbre, ya escaso,  un 14%, se cobró doce vidas de dos expediciones que llevaban escaladores mercenarios. La película cuenta bien esa historia, con el ternurismo justo y la moralina precisa, ciñéndose a los hechos y con un final fatídico, es decir, verdadero. Los créditos del equipo técnico duran casi más que la propia película y cuando acaba dan ganas de quedarse a verla otra vez, por los paisajes y la sensación de aventura y drama. 

Todos los que la han criticado pecan de listillos y de montañeros "enrollados", un oxímoron, porque la gente de la montaña es casi tan genuina como la de la mar. Y he dicho casi...

En efecto, se sube porque está ahí o se navega porque es lo único importante, más que vivir. Y porque ambas son varas de medirse uno mismo.
alfonso

viernes, 11 de septiembre de 2015

Una segunda oportunidad

Luteranismo + culpa
Dir. Susanne Bier
Act. Nikolaj Coster-Waldau, Ulrich Thomsen, María Bonnevie...


Título original: En chance til

Dinamarca, 2014, 105 minutos
Luteranismo + culpa
Un bebedizo infalible debido a la condición autoreconocida de la directora de sus ancestros judíos, que tan buenas películas ha procurado a la cinematografía escandinava, empezando por Dreyer y siguiendo por Bergman. 

No es el caso, por el ritmo, las interpretaciones, los desajustes del guión con alguna trampilla demasiado evidente, y porque la historia naufraga debido precisamente a su excesiva densidad y su pegajosa moralina.

Un policía, padre reciente, acude a la llamada de una mujer maltratada y se encuentra una pareja de yonquis con un niño en estado lamentable. Su propio hijo muere, al parecer de muerte súbita al cabo de unos días y se le ocurre el reemplazo, la segunda oportunidad. Y luego vienen los giros de guión y la moraleja final, acorde con la resolución meliflua de un dilema que no es tal.

Ciertamente las segundas oportunidades no abundan, aunque deberían constar en la Carta de los Derechos Humanos. Pero sin trampas.
alfonso

viernes, 4 de septiembre de 2015

Corazón silencioso

Las ceremonias de los adioses
 Dir. Billie August
 Act. Ghita Norby, Paprika Steen, Danika Curcic...




Dinamarca, 2014, 97 minutos
Las ceremonias de los adioses
El exhibidor español ha cambiado el título, falseando el original. De Corazón en calma a Corazón silencioso hay un mundo, más en un tema de eutanasia. Pero ellos son así, pura basura, como los guionistas de Tele5. 

Sin embargo, se trata de un buen guión original que pasará rápidamente al teatro. Una familia se reúne para pasar las últimas 48 horas de una madre con ELA que ha decidido morir por su propia mano antes de que se le paralice y así no pueda culparse de homicidio al marido médico.

Una buena galería de personajes, casi todos con su escena, con desarrollo algo lento y un poco manierista, al mejor estilo escandinavo, con toques Dogma, pero tanto el planteamiento original como las diversas etapas de la trama están muy bien graduadas y cuentan con interpretaciones sobresalientes. Se agradece la falta de sentimentalismo, a pesar de la temática. Extraordinaria fotografía de interiores, los personajes están encerrados con sus decisiones, en que destacan las texturas y la iluminación nórdica. Y lo mismo puede decirse de la puesta en escena que mima los detalles, especialmente los relojes, que juegan un papel destacado.

Como dice el personaje al que se le toma por algo tonto, los días pasan lentos, los años rápidos. Y se apresura a añadir. "No es que me haya vuelto inteligente de pronto. Es una canción". Para bailarla.
alfonso